Creo fielmente en la idea de que no es posible lograr victorias sino se buscan mecanismos eficaces, para construir una serie de eventos, que culminen en esa palabra mágica denominada unidad.
Está unidad no puede ser exclusivamente la sumatoria de organizaciones políticas para repartirse entre sus cuadros dirigenciales la sumatoria de cargos a elegir en un proceso electoral. La unidad debería ser la sumatoria de las organizaciones políticas, compartiendo una política común que tenga como fin el éxito electoral, para mermar el poder del gobierno, y desplazarlo del gobierno central a corto plazo, está política necesita desprendimiento de parte de los actores involucrados en la misma, se necesita mirar más allá de las organizaciones políticas, los
números son buenos como método de selección de candidatos pero no son suficientes, lo que fue ayer hoy no lo es. El partido político más grande del lado de la oposición se llama Acción Democrática, que para finales de febrero de este año apenas tenía el 1,4 de aceptación del pueblo venezolano. Entre todas las organizaciones opositoras no alcanzaron a reunir el 5% de aceptación.
Ligado a esta situación de pérdida de credibilidad de las organizaciones políticas, está la incomprensible situación de rechazo que hay hacia el liderazgo opositor venezolano que alcanza los mismos niveles que tiene Maduro, llegando a un 89,% de desaprobación.
En mi opinión tenemos que ir al encuentro de un vasto sector de líderes municipales, gente de los sectores organizados, dirigentes gremiales, sindicales, productores del campo, dirigentes políticos, que tienen mucho que proponer y aportar a sus localidades y áreas. No valorar y comprender el momento político sería un grave error de nuestra parte.
En esa misma dirección, está en el ambiente la posibilidad de que sectores o el mismo G4, según lo señalado por James Story comisionado de los Estados Unidos, se pudiese participar en las elecciones regionales. No podemos olvidar que el enemigo político, es el gobierno de Maduro y no los amigos separados de la ruta electoral. Venezuela hoy más que nunca necesita de la concertación de los distintos sectores de la sociedad, recuperar los espacios perdidos, ganando alcaldías y gobernaciones, que nos permitan acumular fuerzas y enfrentar con éxito, unas elecciones presidenciales. Por último, amigos de la alianza portugueseña, no hacemos nada, no será de ninguna utilidad para nosotros ni para el pueblo de Portuguesa, repartirnos los cargos de espalda de la dirigencia municipal y regional, sería una burla para aquellos que confiaron y firmaron un documento en cuanto a que se respetarían los mecanismos de selección de candidatos, como por ejemplo consenso, primarias o encuestas.
Portuguesa espera por toda la oposición.
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