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Gobierno de BIDEN será espectador en revuelta contra Guaidó dentro de oposición venezolana

La administración de Joe Biden no se inmiscuirá en una pugna interna por el liderazgo de la atribulada oposición de Venezuela en momentos en que se gesta una revuelta contra su líder, Juan Guaidó, dijo un funcionario de la Casa Blanca a McClatchy y al Miami Herald.

La decisión de Biden de dar un paso atrás es otro golpe para Guaidó, quien durante años disfrutó de un sólido apoyo bipartidista en Washington, pero cuya influencia ha disminuido en el país sudamericano y en el extranjero a medida que se endurece el poder de Nicolás Maduro en Caracas.

Internamente, el apoyo a Guaidó se ha erosionado en los últimos meses, ya que otros líderes de la oposición expresaron su frustración porque su posición como presidente interino no logró producir la destitución de Maduro y una transición democrática. Varios líderes de la oposición ahora argumentan que se requiere una nueva estrategia para poder avanzar.

El partido político de Guaidó, Voluntad Popular, está combatiendo el impulso a favor de una reorganización inminente. Pero otros grupos de la oposición venezolana han decidido seguir adelante con la formulación de una nueva estructura de liderazgo que acabaría con el llamado gobierno interino en las próximas semanas, dijeron fuentes internas de la oposición a McClatchy y al Miami Herald.

La Casa Blanca no se opondrá a este esfuerzo, dijo un funcionario.

“Estados Unidos continúa reconociendo a Juan Guaidó como el gobierno interino de Venezuela”, dijo un funcionario de seguridad nacional de Estados Unidos. Pero “si la oposición venezolana decide acabar con el gobierno interino, es su decisión”.

El funcionario no dijo si la administración está comprometida a reconocer un nuevo gobierno interino, independientemente de su liderazgo, hasta que se celebren nuevas elecciones.

En el umbral del cambio

Guaidó ha sido la figura central del movimiento democrático de Venezuela desde enero del 2019, después que Maduro se declaró el ganador de unas elecciones cuyos resultados fueron rechazados por gran parte de la comunidad internacional.

Desde entonces, más de 60 países (actualmente muchos se han retirado incluyendo potencias como Alemania), incluyendo Estados Unidos, han reconocido a Guaidó como presidente interino del país.

La constitución de Venezuela otorga este poder al presidente de la Asamblea Nacional en caso de la ausencia de un presidente electo legítimamente.

Los partidos de oposición de Venezuela controlan la Asamblea Nacional desde 2015, cuando se realizaron las últimas elecciones consideradas libres y justas. Pero ni el Congreso de la oposición ni la presidencia de Guaidó ejercen ningún poder real dentro de Venezuela.

Desde que comenzó la crisis presidencial en enero de 2019, el gobierno socialista de Maduro ha levantado su propia asamblea nacional de legitimidad cuestionada para reemplazar al organismo electo.

Un líder de la oposición dijo que el futuro del movimiento democrático de Venezuela “sería finalmente decidido por la Asamblea Nacional”. “Pero a partir de ahora se está formando un consenso de que ya no tiene sentido el concepto de un gobierno interino, y específicamente el papel de Guaidó como presidente interino”, dijo un dirigente opositor que habló bajo condición de anonimato.

“Lo que se discutirá a continuación es cómo será esta Asamblea Nacional sin Guaidó al frente”.

Fuentes de la oposición dijeron que la nueva estructura de liderazgo podría estar lista a fines de noviembre o principios de diciembre, antes de la inauguración de una nueva Asamblea Nacional a principios de enero.

Drama en Panamá

Cuatro de los principales partidos políticos de Venezuela, Primero Justicia, Acción Democrática, un Nuevo Tiempo y VP, discutieron los posibles cambios a principios de este mes en Panamá. El embajador de Estados Unidos en Venezuela, James Story, también se reunió con líderes de la oposición en Panamá al margen de las discusiones.

El diplomático estadounidense expresó su preocupación por el liderazgo del gobierno interino y el manejo de los activos de Venezuela en el exterior, incluyendo las finanzas de Citgo, una empresa estatal venezolana de combustibles que opera en Estados Unidos, confirmaron múltiples fuentes.

Cuando se le solicitó un comentario para este informe, un funcionario del Departamento de Estado dijo que “Estados Unidos reconoce al presidente interino Guaidó”.

La administración, dijo el funcionario, “coordina estrechamente con su administración y con la Plataforma Unitaria los pasos necesarios para avanzar en una solución negociada que conduzca a la restauración de la democracia en Venezuela”.

La Plataforma Unitaria incluye a los grupos que buscan sacar a Guaidó del poder.

Durante el año pasado, la administración Biden se ha distanciado lentamente del movimiento de oposición de Venezuela, negándose a invitar a Guaidó a la Cumbre de las Américas en Los Ángeles este año y abriendo un diálogo directo.

Varios importantes asesores del presidente han expresado interés en ampliar las conversaciones con Maduro desde que la invasión rusa de Ucrania hizo subir por primera vez los precios de la gasolina en todo el mundo. Una oleada de inmigrantes venezolanos en la frontera sur de Estados Unidos también ha obligado a la administración a reexaminar su estrategia hacia Caracas.

La administración dice que no aliviará las sanciones contra Maduro hasta que vuelva a participar en un proceso diplomático con la oposición en la Ciudad de México hacia elecciones libres y justas. Pero cuando se les presionó, los funcionarios no descartaron revocar el reconocimiento de Estados Unidos al gobierno interino.

Fuente ENH

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