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Opinión: La corrupción de la mano de un minero en El Palmar Por Félix Francisco Bertomolde

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En el sur de Venezuela, más allá de Ciudad Guayana, en una región donde un sacerdote chino, Padre Pedro Chien, hizo historia de la buena, no en vano el municipio lleva su nombre, ahora es normal ver a muchos ricos comprando fincas a diestra y siniestra, ganado a dos manos, ricos que han llegado de otros estados, incluso del exterior, y unos pocos, muy pocos, de ahí mismo de El Palmar, quienes de la noche a la mañana dejaron de ser solemnes limpios.

Hechos como estos llaman la atención, más aún si muchos de esos ricos han dejado ver que son enchufados o testaferros de altos personeros del régimen, y deben serlo, porque quien más va a tener tanta plata en este país para invertirla como ellos lo hacen en fundos o haciendas que se los estaba comiendo el monte, convirtiéndolos por obra y gracia de las divisas en centros de producción agropecuaria, algunas de las cuales dicen que tienen hasta pista de aterrizaje y son frecuentadas por capitostes de la dictadura.

El signo distintivo de estos ricos, como le dicen en El Palmar, son las camionetotas que usan, de paquetico, el único que no tiene un vehículo grandote es el nuevo rico que dice haber comprado el Hato San José, de él me habló un colega con quien me reencontré en la capital del país.

Quiero comenzar preguntándote ¿hablas en serio cuando dices que este nuevo rico no tiene una camionetota?

– Así es, Johnny Guédez, de quien hablamos, posee una camionetica Terios Daihatsu, beige, del año 2008, placas AA100KM. Te soy específico con los datos para significarte que pertenece a la ciudadana Lourdes del Valle Rubia Pérez, que reside en Ciudad Bolívar y de quien puedo hablarte más adelante.

¿Cuál es la relevancia de esa información?

– Sencillo, Guédez dice ser propietario de una serie de bienes que en realidad no son de él, por ejemplo, el hato donde vive a todo dar ahora, porque antes vivía en una vivienda rural en El Palmar y andaba a pie. Esos son fuertes indicios de ser cuando mucho el que vela por los intereses de algún corrupto con dinero y poder suficiente para mantenerle su nuevo tren de vida, aunque él dice que es testaferro del ministro Néstor Reverol.

¿Existen elementos para desvirtuar esa afirmación?

– No dispongo de ningún elemento para afirmar lo contrario. Ahora bien, Johnny Guédez asegura haber estudiado con Néstor Reverol, sería en Kinder porque no existen registros de que lo haya hecho en otra etapa, eso sí, el hombre como que tiene acceso al Ministro Reverol porque se la pasa ofreciendo ayudas en su nombre, quiere decir que posiblemente sea uno de sus tantos testaferros por intermedio de un tercero con ciertas prebendas para dar ayudas sociales como las ofrecidas por Guédez.

¿En todo caso, hablamos de testaferrato puro y simple?

– Sí, con una simple miradita a la vida de Guédez es posible afirmar que ese es el rol que asumió gracias a un golpe de suerte, minero al fin, y de allí su riqueza súbita, creándose fama de que sólo maneja dólares y euros para comprar ganado, tierras e insumos, también para darse buena vida con su esposa, pero no siempre fue así.

¿A qué se dedicaba Guédez antes de este cambio tan notable en su vida?

– Como te dije, él toda su vida fue minero artesanal, llegó a tener un buen negocito con su mujer en la mina de Guariche, pero hasta ahí. En la población de Las Claritas, Km 85, Municipio Sifontes del Estado Bolívar, en la carretera nacional El Dorado-Santa Elena de Uairen, creó la Cooperativa Agrominera La Unión Bolivariana (RIF-J316840778), con las que tuvo más penas que glorias, para terminar en El Palmar atribuyéndose la vocería de los mineros artesanales de la zona. También tomó parte en las elecciones regionales de 2013 sin mayor figuración.

¿Cuál sería su delito o delitos, si los hubiera?

– Además del enriquecimiento ilícito, innegable e injustificable al manejar, aunque lo propio sería decir legitimar capitales de dudosa procedencia, podemos hablar también de abuso de poder, no es funcionario público, pero Johnny Elilles Guédez Peraza (nombre real), cédula de identidad 8.064.926, nacido el 09/06/1962, se aprovecha de la autoridad que tienen los cuerpos de seguridad del Estado para intimidar a moradores de la zona, al hato donde vive se llegan los cuerpos policiales o militares antes de hacer procedimientos en las poblaciones circunvecinas.

¿Además de nuevo rico, poderoso?

– Abusador, instigador de odio y violencia, en mi humilde opinión, al igual que su mujer Nelys Sol Matute, cédula de identidad 11.004.620, de 48 años de edad, conocida como la Diva de la Mina de Guariche, y su hijastro Leodan García Matute, cédula de identidad 18.138.978, de 32 años de edad, quienes ya adquirieron fama de ser guapos y apoyaos, como se dice coloquialmente.

No hay rincón de Venezuela que escape a los efectos perniciosos de la corrupción y el abuso de poder, vistos en esta oportunidad en un desventurado minero convertido en un potentado, que a imagen y semejanza de los jerarcas que le dieron su nuevo estatus, hace lo que ellos mejor saben hacer, arremeter contra quien le venga en gana, además de ocuparse en hacer realidad el objeto social de la Cooperativa Agrominera La Unión Bolivariana: el disfrute en la estabilidad en la posesión de las tierras.

Félix Francisco Bertomolde

@memientanchico

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