Los partidos políticos de oposición en Venezuela, con representación mayoritaria en la Asamblea Nacional, repudiaron la designación del directorio del Poder Electoral a través de una sentencia inconstitucional emanada del Tribunal Supremo de Justicia, desconocieron la autoridad del nuevo CNE y adelantaron que no participarán en ninguna elección convocada por ese órgano.
En un comunicado, AD, UNT, PJ, VP, Encuentro Ciudadano, Copei-ODCA, La Causa R, Proyecto Venezuela, Movimiento Progresista de Venezuela, Nuvipa y Cuentas Claras tildan de «ilegítimo» el nuevo directorio encabezado por la exmagistrada Indira Alfonzo, porque “se dio sin permitir las postulaciones de la sociedad civil, pasando por encima del Comité de Postulaciones Electorales”, entre otras irregularidades.
A juicio de los partidos firmantes del comunicado, la acción política emprendida por el TSJ con el aval de Miraflores “da al traste con la necesidad de contar con un árbitro electoral imparcial, primera condición de muchas que son necesarias para una elección legítima en Venezuela”.
En consecuencia, los partidos que reúnen a la oposición mayoritaria del país anunciaron su rechazo a la “pretensión dictatorial de convocar una farsa electoral parlamentaria que, sin contar con las condiciones mínimas de transparencia, confianza y libertades públicas, solamente servirá para agravar la actual crisis política y humanitaria que azota a los venezolanos”.
Asimismo, advierten a la opinión pública interna y externa sobre el inminente despojo de sus tarjetas y símbolos partidistas “para entregárselas a falsos líderes opositores que luego de haber sido comprados por la dictadura y sin la más mínima vergüenza pretenden convalidar otro fraude electoral”. El despojo, alertan, seguiría los mismos procedimientos judiciales amañados que desmembraron en el pasado reciente a Podemos, Patria Para Todos, Bandera Roja y Copei.
“Por todo esto queremos dejar claro ante el país y el mundo que los partidos democráticos venezolanos no convalidamos ni reconoceremos ninguna farsa electoral montada por la dictadura para su propia conveniencia, ni mucho menos los resultados dados por unos supuestos rectores elegidos a dedo por el dictador a través de su legión de juristas del horror”, dice el texto.
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