Su condena la cumplirá en una cárcel de mínima seguridad en Texas y solo por 11 meses, pues ya tiene 7 meses computados a su pena
El empresario Roberto Enrique Rincón Fernández, responsable de sobornar a funcionarios de filiales de Pdvsa a cambio de beneficios y jugosos contratos, recibió una pena leve de 18 meses de prisión, mientras que otro implicado en esta trama, José Luis De Jongh-Atencio, quien fue empleado de la petrolera, fue sentenciado a 48 meses de prisión por decisión de un tribunal del Distrito Sur de Texas, Estados Unidos.
Rincón Fernández confesó durante el proceso, en junio de 2016, que había pagado sobornos por unos 1.000 millones de dólares (USD 1.000.000.000) a funcionarios de Pdvsa, especialmente Citgo, para que le asignaran contratos a sus empresas, entre 2008 y 2014, y obtuvo ganancias millonarias aplicando sobreprecios en perjuicio de la petrolera venezolana.
Su condena la cumplirá en una cárcel de mínima seguridad en Texas y solo por 11 meses, pues ya tiene 7 meses computados a su pena por los delitos de conspiración para violar la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero (FCPA) y suministro de información falsa en su declaración federal de impuestos sobre la renta de 2010.
El empresario pasó una corta reclusión de 7 meses en su mansión, después de pagar una fianza de 5 millones de dólares (USD 5.000.000). Ahora debe pagar el resto de la condena.
En el expediente se señala que Roberto Enrique Rincón Fernández se asoció con otro de los señalados, Abraham Shiera, para negociar con Pdvsa, y ambos optaron por pagar jugosas comisiones a empleados de la petrolera venezolana para ser incluidos en las licitaciones, obtener privilegios en los pagos y garantizar su permanencia como proveedores.
Por esta trama de corrupción fueron congeladas 730 cuentas bancarias, en bancos de varios países, especialmente Suiza y Panamá.
José Luis De Jongh-Atencio fue jefe de Adquisiciones y gerente del Grupo de Proyectos Especiales de Citgo. Se declaró culpable el 22/03/2021 y esperaba sentencia desde agosto de 2021.
Pagó dos millones de dólares (USD 2.000.000) en su momento por su libertad provisional.
De Jongh-Atencio era uno de los funcionarios de la filial de Pdvsa que recibió pagos en efectivo y transferencias por su colaboración con los empresarios también corruptos. Entre los beneficios que recibían los empleados de la petrolera estaban viajes, comidas, obras de arte originales y bienes lujosos.
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