Por Santi Andrés Hueck
El futbol es un deporte capaz de transmitir alegría, tristeza, furia, ansiedad, asco (sinónimo de ser del Madrid) y todas las demás emociones que incluyan en las próximas películas de intensamente; pero una emoción que todavía Riley no ha experimentado, es el amor. El amor puede ser hermoso, a no ser que te llames Jenni.En ese caso, puede ser tu peor pesadilla o la razón para sacar todo de proporción y arruinarle la vida a un hombre. Así que, pensándolo bien, podrás disfrutarlo a tu manera por lo que te contamos la historia de un mundial, manchado de rojo.
Un beso de cárcel:
España es uno de los países que ha priorizado políticas feministas, pero muchas veces, se ha llevado al extremo. Durante esta semana, se ha llevado acabo un juicio en contra de Luis Rubiales por culpa de un beso: El 20 de agosto de 2023, la selección femenina de España ganó el evento de la Copa Mundial Femenina tras vencer a Inglaterra en la final. Durante la ceremonia de entrega de medallas, Luis Rubiales, protagonizó un acto que generó una enorme controversia: besó en la boca a Jenni Hermoso sin su consentimiento aparente. Este hecho fue captado por las cámaras y se viralizó rápidamente. El futbol femenino no es lo más vistoso del mundo, pero este evento, hizo que el primer mundial de la selección española, fuera una mancha en su historia. Envés de enaltecer el nombre de España, terminó hundiéndola en un mar de polémicas, que perdurara en el tiempo.
Jenni Hermoso emitió un comunicado a través de su sindicato (FUTPRO) negando que el beso fuera consensuado. Declaró que se sintió vulnerable y víctima de una agresión. Posteriormente La Fiscalía española abrió una investigación por posible agresión sexual contra Rubiales, basándose en la denuncia de la futbolista española. La FIFA suspendió provisionalmente a Rubiales de sus funciones por 90 días, mientras se investigaba el caso. El gobierno español y el Consejo Superior de Deportes (CSD) también intervinieron, solicitando la destitución de Rubiales. El 10 de septiembre de 2023, Rubiales anunció su renuncia como presidente de la RFEF, tras semanas de presión pública y mediática.
Hasta este punto, estaba todo bien. Después de todo lo que se armó, Rubiales merecía un castigo, eso es evidente. La destitución “voluntaria” de su cargo era bien merecida; sin embargo, esto llego a un punto insostenible, el juicio es una exageración total. Las acciones, del ex presidente de la Federación española de fútbol son repudiables e injustificadas, y no caben bajo ningún contexto, a menos que seas Iker Casillas con la realidad totalmente alterada, pero el simple hecho, que un beso sea la razón por la que una persona este enfrentando un juicio por el que puede pagar más de 2 años de cárcel, no tiene sentido.
La primera semana del juicio empezó con Jenni Hermoso como protagonista. Manifestó las innumerables peticiones para que dijese que el beso fue consentido y ratificó su postura al decir que no lo aprobó: “Sabia que me estaba besando mi jefe y esto no ocurre ni debe ocurrir en ningún ámbito laboral o social” e intento defender sus acciones luego del beso, acciones que permiten cuestionar si realmente se sintió afectada en el momento: “Mi actitud de como esté, no quita lo que yo siento. No tengo ni que estar llorando en una habitación, ni haberme tirado al suelo cuando paso el acto para dar a entender que eso no me gusto”. En eso tiene toda la razón, pero también si luego, cuando estas en el autobús con las demás jugadoras de la selección, te ríes con ellas de lo que paso, comparándolo con Casillas en el mundial de 2010, tan afectada no sé si estaba. Familiares y compañeras salieron a respaldar las declaraciones de la futbolista española.
Tres días después del beso, en el despacho de Rubiales, se orquesto una reunión a la que se ha aludido alguna vez como “gabinete de crisis”, y de la que ha habido distintas versiones. Patricia Pérez, responsable de prensa de la Selección femenina, la calificó de “encerrona” para que cambiase, por sugerencia de Rubiales, algunas de sus respuestas en un informe interno de la Federación que se cerró sin consecuencias para él, y sitúo en ella, además de al círculo de confianza del expresidente, a Luis de la Fuente. De la Fuente lo negó y dijo que aquel día fue a reunirse con Rubiales, en una sala anexa, para hablar de fútbol, pero su versión despertó las dudas de la fiscal, que advirtió de que existe el “falso testimonio”, algo que valorará al final del juicio. La próxima semana el antagonista de la historia (Rubiales) dará la cara en el juicio como testigo.
Exponen a Iker Casillas:
La RAE define la palabra metedor como una “persona que mete o incorpora algo en otra cosa”, pero depende de a quien le preguntes (Gerard Pique), te dirá que es Iker Casillas. Casualmente, en todo este caos de Rubiales y los recuerdos del beso de Iker en 2010 con la entrevistadora, pues parece, que el campeón del mundo, ganador de mundial, quiere seguir conquistando títulos, pero esta vez no le salió del todo bien.
La actriz de Only Fans (si es que se le puede llamar así), Claudia Bavel, visitó el plató de ‘De Viernes’ y expuso algunas de las conversaciones que tuvo con el ex portero del Real Madrid. Iker salió a defenderse por medio de un comunicado y establecer las posibles consecuencias para quienes atenten contra su intimidad “No voy a permitir más intromisiones en mi vida privada ni actuaciones que vulneren o menoscaben mi honor […] No voy a consentir que el hecho de ser considerado un ‘personaje público’, no se me respete o ello suponga no tener intimidad y vida privada, a la que tengo igual derecho que cualquiera”. “Por ello, y como ya vengo haciendo desde hace tiempo (con resultados favorables hasta la fecha), he dado instrucciones para que cualquier vulneración de mi intimidad y/o honor, venga de quien venga y sea en el medio que sea, sea perseguida legalmente mediante las acciones civiles oportunas, reclamando los daños que estas conductas me hayan causado”
La regalada no se quedó atrás y reafirmó la guerra fría de los comunicados: manifestó que ella no ha hecho nada malo, y que está en todo su derecho de compartir sus “experiencias y vivencias” sin que ello implique “un ataque o vulneración” de la intimidad de terceros, es decir, de Iker. Además de su derecho a la libertad de expresión: “Me resulta sorprendente que se pretenda presentar mi testimonio como un ataque, cuando en todo momento he difundido información veraz y que sirve de respuesta a la negativa de una relación amorosa”, aclarando que en todo momento lo que ha compartido se basa “en hechos reales” que forman parte de su vida y de su experiencia personal con Casillas y, al igual que el jugador español, también buscará proteger su integridad y reputación (si es que le quedaba alguna) frente a cualquier intento de desinformación o ataque infundado contra su persona.
Semana de polémicas en un mundial y más farándula que futbol, pero que en contextos totalmente diferentes, son situaciones similares que evidencian una sociedad descompuesta por decisiones incorrectas. En estas historias hubo de todo, menos el mínimo gesto de amor.
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