Los arqueólogos están sorprendidos por la “ciudad fantasma” de Nan Madol, construida sobre misteriosos islotes tallados simétricamente en medio del Pacífico.
La apodan ‘la Atlántida del Pacífico’, de la cual los relatos de pueblos cercanos indican que esconde otras ciudad misteriosa bajo las aguas que irradiaba luces, y que aún no ha sido investigada.
* Según los lugareños, un mago llevó las grandes piedras, de las que está compuesta la ciudad, desde el otro punto de la isla.
Una civilización construida en medio del océano Pacifico fue declarada como patrimonio de la humanidad por la Unesco en el 2016. ¿Por qué ha causado tanto interés en científicos y admiradores? Uno de los motivos es que la antigua ciudad fue construida sobrearrecifes de coral hace 14.000 años.
La vista superficial muestra que Nan Nadol corresponde a casi un centenar de islas artificiales con gigantescos megalitos sobre bancos de coral al este de la isla de Temwen, en la costa sureste de la isla de Pohnpei (Estados Federados de Micronesia) que se extienden por cerca de 1,5 kilómetros. .
Al parecer el Nan Madol en algún momento llegó a ser la capital tanto política como ceremonial de la dinastía Saudeleur. Aunque en realidad existen muchas teorías sobre su construcción, se estima que las personas vivieron en este lugar desde el siglo I y II d.C.
Lo poco que la antigua edificación de la ciudad nos ha dejado saber, es que era bastante grande. Se calcula que cada piedra que compone los edificios y muros en Nan Madol tiene un peso de aproximadamente 20 a 50 toneladas.
Aún en la actualidad existen múltiples enigmas que no se han resuelto sobre este misterioso lugar. Una de las incógnitas que desde hace mucho tiempo ronda en las cabezas de las personas es, ¿Quién construyó los particulares islotes? ¿Cómo pudieron realizar esta edificación en medio del mar hace tantos años?
Los lugareños tienen miedo de entrar en esta zona, a la que consideran embrujada, y los científicos, después de visitar el lugar tienen más preguntas que respuestas para ofrecer.
“¿Por qué alguien construiría una ciudad en el medio del océano?”, comentó recientemente el arqueólogo Patrick Hunt en Science Channel. “¿Por qué aquí, tan lejos de cualquier otra civilización conocida?”.
Realmente se desconocen muchos detalles sobre todo el tema de este lugar. Sin embargo, se sabe que la palabra Nan Madol significa “Lugar entre los espacios”. Obviamente haciendo referencia a sus canales.
Aunque la ciudad, esconde secretos sobre su misteriosa construcción ha sido posible a través de investigaciones saber qué tipo de piedra fue empleada. La edificación consta de enormes rocas de basalto, ricas en silicatos de magnesio y hierro. Generalmente se caracteriza por tener un color oscuro, y resulta muy atractiva a la vista.
Los 100 islotes artificiales que se encuentran en Nan Madol están conectados a través de canales. Debido a esta pequeña particularidad el lugar ha sido conocido también como “La Venecia del Pacifico”. Los muros miden al menos 15 metros de altura.
¿Qué tipo de maquinaria se usó para la construcción?
Se dice que para la edificación de este fabuloso lugar no empleó ningún tipo de grúa, polea, o maquinaria avanzada. Este factor ha dejado a más de una persona realmente intrigada. ¿Es posible que existiera alguna fuerza sobrenatural que les permitiera construir este lugar?
La Leyenda de los gemelos brujos
Durante mucho tiempo, se ha tenido la creencia de que los gemelos conocidos como Olisihpa y Olosohpa tuvieron algo que ver con la creación de los islotes.
Principalmente quienes se hacen eco sobre la veracidad de esta antigua leyenda son los habitantes de Pohnpei.
Según cuenta la historia, estos gemelos provenían de un lugar místico llamado: “Katau Occidental”. Viajaron en una canoa hasta llegar a Nan Madol. Una vez que se establecieron, decidieron construir un altar para rendir adoración al dios de la agricultura llamado Nahnisohn Sahpw.
Rituales mágicos de los gemelos
Para poder crear el altar los hermanos necesitaron realizar rituales mágicos, debido a que se encontraban en medio de la nada y deseaban adorar a su dios. Pudieron construir el altar gracias a la ayuda de un dragón volador, por medio de este, las piedras levitaron desde el fondo del profundo mar.
Una vida dura en Nan Madol
Así era descrita la vida en estos islotes, debido a que se encontraban en el medio de la nada. Para poder tener agua dulce y algunos alimentos, los habitantes del Nan Madol debían recurrir a las islas cercanas y buscar sus provisiones. Estas eran entregadas a sus amados líderes.
Parte de Nan Madol Bajo las aguas
Luego de las investigaciones llevadas a cabo por buceadores, pudieron observar que sumergido en el mar existen restos de la ciudad. No solo observaron partes de antiguas carreteras, sino también avenidas y cementerios que un día formaron parte de los islotes.
Al parecer el lugar se encuentra deshabitado actualmente por lo dura que puede resultar la vida, y la dificultad para encontrar lo necesario para sobrevivir. Se estima que tal vez, estos islotes de Nan Madol pueden desaparecer con el tiempo por la gran cantidad de lodo en las vías de navegación.
Fuente: https://dimensionalterna.net/
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