En medio de las protestas multitudinarias y manifestaciones que recientemente se efectuaron en Chile, que comenzaron tras el anuncio del gobierno de subir el precio del billete de metro en la capital ya han dejado 20 muertos.
La situación se ha tornado demasiado violenta que ha llegado a la destrucción y quema de los bienes de Dios en la república de Chile, así lo dijo, Danilo Silva, miembro de Círculo de Estudios Ezequiel y Plataforma Cristianos Pro Valores.
Ha habido una ola de vandalismo, que incluye la quema y destrucción de iglesias, tanto católicas como evangélicas, llamas que han incluido a los templos y no se salvan los hermanos cristianos en Chile.
Una docena de templos evangélicos han sido quemados en los primeros seis meses del año.
Las siguientes iglesias evangélicas (y un ministerio televisivo) fueron atacados (incluye nombre de pastor, ubicación y fecha del siniestro):
Centro de Restauración Internacional (CRI Chile), ubicado en Valparaíso, Pastor Alejandro Valdés, atacada el 20 de octubre.
Iglesia Presbiteriana de Valparaíso, ubicada en Condell 1502, Valparaíso, Pastor Caleb Fernández, atacada el 26 de octubre.
Iglesia Alianza Cristiana y Misionera (ACyM), ubicada en el sector rural de La Púa, Victoria, Araucanía, atacada el 29 de octubre.
Iglesia Bendecidos para Bendecir, ubicada en Santa Rosa 2, tercer piso, Santiago Centro, Pastor Josué Muñoz, atacada el 28 de octubre.
Estudios de grabación y dos oficinas del Ministerio de Comunicaciones GRACIA TV, ubicados en Santa Rosa 2, tercer piso, Santiago Centro, Pastor Josué Soto, atacada el 28 de octubre.
Iglesia Ministerio Internacional para la Familia (MINFA), ubicada en Alameda 632, dependencias del Hotel Mercure, Santiago Centro, Pastor Pablo Rojas, atacada el 28 de octubre y la Iglesia Asambleas de Dios, ubicada en Prieto Norte 226, Temuco, atacada entre el 19 y 20 de octubre.
No se salva ni el pueblo de Dios
Numerosas organizaciones cristianas evangélicas chilenas, han emitido comunicados, manifiestos y rechazos por los hechos ocurridos en las calles de Santiago y de otras ciudades importantes.
Muchos chilenos cristiano, dicen que existe un gran malestar subyacente a estas manifestaciones; y como iglesia, es necesario que la oración nos lleve fuera de los templos a empatizar con los problemas sociales profundos y dejar a un lado la indolencia y el silencio cómplice (que desgraciadamente ha caracterizado a muchas de las iglesias a través de la historia de Chile.
El principal punto de concordia ha sido en el llamado a la oración para restablecer el “orden social”.
Que Dios tenga piedad de nosotros porque el ataque del enemigo es feroz sobre la gente más humilde. En el nombre de la justicia social se están cometiendo las más grandes aberraciones y la mayoría de los jóvenes de este país, no saben la mentira y la manipulación sobre ellos, de manera que ejercen violencia ilimitada para implantarla. Señor aclara la confusión, porque hemos pecado contra ti y no hemos sabido dejar tu herencia en nuestros hijos. Ten misericordia de este pueblo.
“Pidamos para que el orden social sea restablecido oportunamente y asumamos un compromiso activo para contribuir en esta tarea”, ha señalado el presidente de la Unión de Iglesias Evangélicas Bautistas de Chile (UBACH), Juan Carlos Barrera.
Barrera “Lamento profundamente las acciones violentas y vandálicas que contaminan la mirada e impiden ver el trasfondo detrás de estas manifestaciones en distintas regiones del país. Lo observado en Santiago indica que hay algo más. No se trata sólo de estudiantes evadiendo el metro, se trata de un problema mucho mayor. Pero la violencia no es el camino que propone Jesús y no podemos apoyarla”.
En un tono claramente pro gubernamental, el Concilio Nacional de Iglesias Evangélicas de Chile (CONIEV) ha expresado “todo su apoyo al presidente Piñera” y ha acusado a quienes están detrás de los actos vandálicos de ser “siervos de las tinieblas”.
“El orden público es la perfecta voluntad de Dios para la sociedad, y en esta hora corresponde apoyar a las fuerzas armadas y los carabineros, que son los responsables constitucionales de mantenerlo”.
“La iglesia tiene que levantarse para poder orar”, han señalado desde la organización evangélica Cristianos por Cristo y por Chile, quienes también han llamado a la población evangélica a salir a las calles “para ayudar a recoger los escombros y limpiar las estaciones del metro”.
Desde la entidad han reconocido que el incremento del precio del billete del metro ha sido la punta de lanza de un “descontento cierto de la ciudadanía frente a tanta injusticia”.
“En horas, un país se transforma en caos y es importante que la iglesia esté preparada y tenga un contingente de personas para desarrollar no solo una labor espiritual”, han remarcado.
Diferentes líderes evangélicos chilenos han convocado también un movimiento de oración desde la plataforma ‘Chile oramos por ti’, que ha organizado convocatorias para orar desde casa a diario. “Este es el tiempo de orar unidos por nuestra nación”, han explicado.
Pero, en qué consisten los ataques?
Han sido ataques incendiarios y han sido de una parte de las multitudes que luego de las manifestaciones han hecho desmanes, disturbios, saqueos y actos vandálicos, incluso extremistas. Y algunos se les podrían llamar —y yo no dudaría en usar la palabra— terrorismo, quizás no en este caso específico, pero sí ha habido terrorismo en esto, me refiero a todo el conjunto de cosas que están pasando.
Los ataques fueron incendiarios y también de vandalismo, como sucedió en una iglesia que intentó ser quemada, pero por fuera pusieron rayados que decían «iglesia bastarda» .
Entonces, en ese contexto, tú puedes ver que no es solamente una parte más, una vertiente más de todo este fenómeno social caótico que estamos viendo, sino que también hay algunos grupos y algunas personas interesadas y quizá más de algún grupo y más de algunas personas interesadas en atacar directamente a la Iglesia Cristiana Evangélica.
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