Opinión: Reflexiones de mi vida, Por Carmen Esperanza Iribarren

El mundo y la vida para mí se convirtieron en un sitio oscuro. Un túnel sin salida. Esta profunda tristeza no me deja, me ahoga. Ya ni siquiera me veo en el espejo, no quiero ver el reflejo de este ser gris lleno de desconsuelo en que me transformé desde hace 2 años cuando llegué a este lugar y personas que ni siquiera me conocìan colaboraron para aniquilarme emocionalmente. Ya no leo, no escribo… no hago nada. Sólo mastico mi melancolía y pienso en lo mal que me siento, lo mal que estoy. Mi cabeza da vueltas y me pregunto una y mil veces ¿POR QUÉ, por qué tanta maldad, tanta injusticia?. ¿Qué fue lo que les hice para merecer tanto daño, para que se ensañaron causåndome dolor?. Contribuyeron para que me quitaran el amor y me arrancaron el alma, sólo me dejaron lo que sè, lo que llevo en mi cerebro y en mi corazón y eso es porque nadie, por más que quiera me lo puede arrebatar.