Las investigaciones contra el ex presidente continúan llegando a los tribunales en tanto que las que pesan sobre el presidente se retrasan o son entorpecidas.
El Departamento de Justicia (DOJ, por sus siglas en inglés), se ha convertido en el “arma absoluta” de la Administración Biden, en palabras de Donald Trump.
Merrick Garland continúa apretando el acelerador para cubrir al expresidente de acusaciones ante los tribunales antes de que pueda conseguir la nominación republicana como candidato presidencial en 2024.
Al mismo tiempo, los máximos responsables del cumplimiento de la ley siguen moviéndose en la sombra para proteger a la familia presidencial de las investigaciones sobre sus negocios en el extranjero.
Además de entorpecer la labor del Comité de Investigación de la Cámara de Representantes, como denuncia James Comer, el FBI aconsejó al investigador de Hunter Biden que declinase responder en su comparecencia en el Congreso.
Trump acusa a Biden y al DOJ de “interferencia electoral”
Durante un town hall en Fox, Trump reiteró sus acusaciones de que se trata de una “interferencia electoral” por parte de Joe Biden y del Departamento de Justicia. El expresidente subrayó que “nunca se ha hecho así en la historia de nuestro País, y es una vergüenza”.
El magnate además, señaló que la agencia de Garland es un “arma absoluta” en manos de los demócratas.
Los más de nueve millones de dólares invertidos en las pesquisas del fiscal especial Jack Dorsey sobre Trump ya han llevado al expresidente ante un tribunal de Florida por el caso de los papeles clasificados.
La carta recibida el pasado domingo por el magnate parece indicar que también servirán para obligarle a presentarse ante otra corte para responder sobre su presunta implicación en un intento de revertir los resultados de las elecciones de 2020 y su participación en los incidentes del 6 de enero.
Carta amenazante del FBI a un informante antes de comparecer
Tanto la cantidad de dinero invertida, como los tiempos y los movimientos contrastan brutalmente con el trato que está recibiendo la familia Biden. Con poco más de un millón gastado en la investigación de la documentación clasificada encontrada en varias de sus dependencias y viviendas, la labor del DOJ y de las agencias de seguridad está siendo muy prudente y mantiene un ritmo bastante lento.
Eso cuando no trata directamente de proteger al presidente y su vástago, como viene denunciando reiteradamente Comer desde la comisión de Supervisión de la Cámara de Representantes.
El mismo día que Trump hacía público que estaba a un paso de una nueva acusación The New York Post publicaba en exclusiva que el FBI advirtió, mediante una carta amenazante, a un supervisor retirado que no respondiera a los legisladores republicanos sobre Hunter.
El ex agente había denunciado que la investigación había sido saboteada por el FBI y el DOJ. La nota le fue entregada a última hora.
“El Departamento espera que usted se niegue a responder”
Según la información de Miranda Devine, el consejero general del Bureau Jason Jones, hizo llegar su misiva al informante horas antes de su comparecencia. En ella, señala que la agencia “espera” que se negara a responder y remitir las preguntas a la Oficina de Asuntos del Congreso del FBI.
El Departamento espera que usted se niegue a responder a preguntas que busquen información no pública probablemente cubierta por uno o más componentes del privilegio ejecutivo u otros intereses significativos de confidencialidad, en particular información sobre deliberaciones o actividad de investigación en curso en asuntos de aplicación de la ley.
En su lugar, debería remitir dichas preguntas a la Oficina de Asuntos del Congreso del FBI. En consonancia con la práctica habitual, esto dará al Departamento la plena oportunidad de considerar preguntas concretas y posibles adaptaciones que puedan satisfacer la legítima necesidad de información del Comité, protegiendo al mismo tiempo los intereses de confidencialidad del Poder Ejecutivo.
EL GOP denuncia las dificultades del DOJ para investigar los negocios de la familia Biden
El trabajo de los congresistas republicanos, aprovechando su mayoría en la Cámara Baja, está encontrando la resistencia de las agencias oficiales. Retrasos en entregar la documentación solicitada, comparecencias en las que no aportan nada, como hizo el director del FBI, Christopher Wray, la semana pasada, son algunos de los puntos denunciados por los legisladores conservadores.
No son, sin embargo, lo más grave que han encontrado, puesto que a lo largo de las sesiones de los comités han detectado encubrimiento a Joe Biden sobre la presunta trama de soborno durante su etapa de vicepresidente con Obama e incluso represalias contra los agentes que investigaban o denunciaban los hechos.
Fuente: https://voz.us/el-doj-acelera-contra-trump-mientras-protege-a-la-familia-biden/
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