La identidad de género es real, concluyó un juez federal que bloqueó temporalmente partes de una nueva ley de Florida que prohibía que los menores de edad transgénero recibieran tratamientos de bloqueadores de pubertad.
El juez Robert Hinkle dictó una medida cautelar, diciendo que tres niños transgénero pueden seguir recibiendo tratamiento.
La demanda cuestiona la ley que el gobernador republicano Ron DeSantis firmó la misma semana en que anunció su candidatura a la presidencia.
“El elefante en la habitación debe tenerse en cuenta desde el principio. La identidad de género es real. El expediente lo deja claro”, dijo Hinkle, añadiendo que incluso un testigo del Estado estaba de acuerdo.
“A pesar de las admisiones de la defensa, hay quienes creen que los individuos cisgénero se adhieren correctamente a su sexo natal y que los transexuales han elegido inapropiadamente una identidad de género contraria, masculina o femenina, igual que uno podría elegir si leer a Shakespeare o a Grisham”, prosiguió.
El fallo se centró estrictamente en los tres niños cuyos padres presentaron la demanda.
La demanda no aborda otros aspectos que dificultan o casi imposibilitan que los adultos reciban o continúen recibiendo atención médica para la reafirmación del sexo, publicó la agencia AP.
Hinkle dijo que las personas que creen erróneamente que la identidad de género es una elección también “tienden a desaprobar todas las cosas transgénero y por lo tanto se oponen a la atención médica que apoya la existencia transgénero de una persona.”
Prohibir el tratamiento a los menores ignora los riesgos a los que pueden enfrentarse los pacientes, afirmó Hinkle.
“Existen riesgos derivados de no utilizar estos tratamientos, incluido el riesgo de ansiedad y depresión e incluso de ideación suicida. La ley impugnada ignora los beneficios que muchos pacientes obtienen de estos tratamientos y el riesgo sustancial que supone renunciar a ellos”, dijo el juez.
También señaló que los tratamientos hormonales y los bloqueadores de la pubertad se utilizan a menudo para tratar a niños no transexuales por otras afecciones, por lo que la ley hace que su uso sea legal para algunos, pero no para otros.
“Los hijos adolescentes de los demandantes sufrirán daños irreparables -el inicio y la progresión no deseados e irreversibles de la pubertad en su sexo natal- si no inician sin demora el tratamiento con agonistas de la GnRH. El tratamiento afectará a los propios pacientes, a nadie más, y no causará ningún daño a los demandados”, declaró Hinkle.
Fuente ElTiempolatino.com
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