El ex dirigente sindical del magisterio larense, Humberto Agudo, exigió al presidente Nicolás Maduro que a la par del inicio del año escolar 2022-2023, ordene el pago del bono de fin de año a los trabajadores de la educación en Venezuela, a fin de evitar que la devaluación del bolívar convierta en polvo cósmico el salario de docentes, obreros y personal administrativo.
Agudo se mostró sorprendido ante la expectativa positiva que mantiene el gobierno con la vuelta a clases a partir de este lunes 3 de octubre y advierte que no se puede engañar a nadie promocionando un sistema educativo fortalecido “cuando la realidad es que más del 85 % de los plantele, de los 27 mil 800 existentes, están en condiciones deplorables a nivel de infraestructura, servicios públicos, material educativo, programas de alimentación y pésimas condiciones socioeconómicas de los trabajadores educacionales”.
También refirió al abandono de las aulas de clases por parte de más de 220 mil docentes los últimos años, así como la deserción de unos dos millones de alumnos, a consecuencia de la pobreza que viven la mayoría de los venezolanos.
“Nadie duda del impacto que ha tenido el cierre técnico del Programa de Alimentación Eescolar (PAE), una alternativa para las familias de escasos recursos y el gobierno lo destruyó porque su política central es el adoctrinamiento de nuestros estudiantes ofreciendo una educación de muy mala calidad”, denunció Agudo desde el exilio.
Recordó que el régimen de Maduro continúa violentando los derechos sociales de los educadores, poniendo como ejemplo lo ocurrido recientemente con el pago del bono vacacional de manera fraccionada y después de devaluar la moneda venezolana, acotando que se han violado las contrataciones colectivas y los derechos adquiridos “y ahora para colmo de males el gobierno anuncia que pagará fraccionado el bono de fin de año, otra violación de los derechos sociales de los educadores pues lo harán con un bolivar totalmente devaluado”, proponiendo que el pago completo de aguinaldos sea una lucha de carácter reivindicativo y social de los educadores y su dirigencia sindical para poder garantizar un nuevo año escolar.
Fuente: Prensa Tricolor
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