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Opinión

Lo que Bolton en su libro no dice de Trump y Las Pulgas según Chávez Opinión por Gian Carlo Di Martino

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1-. La vagabundería de la Reina Isabel II de Inglaterra… Sé que las señoras merecen respeto, más si alcanzan una noble edad de 94 años, pero el problema es que Elizabeth Alexandra Mary, es nada más y nada menos, que la Reina Isabel II de Inglaterra y, obviamente, está vinculada con la politiquería y toda esa perversión que los británicos ejercen como política. Es imposible, entonces, pasar por alto la bajeza que tuvo en contra nuestra la tal soberana, felicitando a “El Rastrojo” Guaidó el 5 de Julio, cuando se conmemora la firma del Acta de Independencia de Venezuela. Esa señora debe saber que el saludo a ese hampón es una afrenta para los bolivarianos que llevamos la patria en el alma. Elizabeth tenía perfecto conocimiento de que congratuló a un vagabundo que se autoproclamó presidente interino de Venezuela en una plaza de Caracas. Desconozco si en el Reino Unido así escogen a las reinas, los príncipes; en la Patria de Bolívar, se eligen los presidentes mediante votaciones libres y transparentes como hicimos con Nicolás Maduro Moros. Ahora que al ladrón de Guaidó, terrorista y golpista, sea reconocido por el anticristo Donald Trump como presidente y ella es de las orgullosas serviles de ese genocida imperial, es su problema, pero tampoco se puede permitir que nos agreda y se haga cómplice de un bandido que se quiere robar las reservas de oro de Venezuela retenidas en el banco de Inglaterra, recursos que reclama Nicolás Maduro para costear el tratamiento de los pacientes afectados con Covid-19… Eso es una vagabundería. En mi criterio, no merece respeto una persona que no le importe la vida de mis compatriotas, así tenga 100 años. Mueren venezolanos por la pandemia y eso duele en el alma.

2-. El doble racero de la Unión Europea… Hay un hecho reciente que corrobora de una manera vergonzosa la doble cara de la Unión Europea. Ante tantas agresiones, dado su servilismo al anticristo Donald Trump, el presidente Nicolás Maduro Moros le dio 72 horas a la embajadora de esa Nicolás Maduro Moros le dio 72 horas a la embajadora de esa comunidad de países, Isabel Brilhante Pedrosa, para que abandonara la embajada de Caracas. Horas después un tribunal de Inglaterra falló a favor de entregarle al ladrón Juan Guaidó las reservas de oro de Venezuela, sustentando la decisión en que los británicos no reconocen como presidente a Maduro sino a Guaidó. Pero, a la expulsión de la diplomática, inmediatamente el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, entró en contacto con nuestro canciller Jorge Arreaza, con la finalidad de tratar la decisión presidencial y coincidieron en la necesidad de mantener el marco de las relaciones diplomáticas, especialmente en momentos en los que la cooperación entre ambas partes puede facilitar el camino del diálogo político. Y así lo hicieron saber a través de un comunicado conjunto. En consecuencia, el presidente Maduro reconsideró su decisión. Pero usted camarada lector, camarada lectora, puede observar cómo un tribunal británico, por un lado argumenta reconocer a Guaidó como presidente de Venezuela y, por otro, Josep Borrell reconoce a Maduro, porque de lo contrario no hubiese tenido conversación con Arreaza ni permitido la elaboración de un comunicado a dos manos ¿o no?… Pero así son los ataques en contra de la Patria de Bolívar por parte de los países sumisos a los gringos. Así es el doble racero de la Unión Europea en el mundo. ¡Basta de agresiones contra el pueblo de Venezuela!

3-. De conspiraciones a súplicas… Los terroristas en Venezuela y el exterior quieren percibirse amenazantes, pero la realidad es que esas amenazas no son más que jadeos de moribundos, porque esos delincuentes siguen buscando en el anticristo Donald Trump una bombona de oxígeno. El exasesor de seguridad norteamericano, John Bolton, en su libro titulado: “la habitación donde ocurrió”, le prendió fuego a ese pajonal seco en que devino la oposición, al develar algunos aspectos puntuales de la perversión criminal de Trump contra la Patria de Bolívar, e hizo salir a todas esas ratas despavoridas, sin rumbo, sin hallar qué hacer, incluso, un juez británico falló a favor de robarse las reservas de oro que Venezuela tiene en un Banco de Inglaterra. La señora Vanessa Neuman, embajadora de fantasía de Guaidó en Londres, vinculada al paramilitarismo colombiano y obviamente pieza clave en ese robo, amenazó de muerte al presidente Nicolás Maduro, antes lo hizo Carlos Ortega –no sé si estaría “buenisano”- reapareció dándole un ultimátum al máximo jefe de la revolución bolivariana en Miraflores, mientras saltó el comisario llorón, Iván Simonovis, encapillado después del fracaso de la mercenaria incursión por las costas del estado La Guaira en Venezuela, diciendo que en colaboración con el TIAR y Carlos Paparoni, avanzaban en la identificación de personas y empresas que favorecen a Maduro, para ser sancionadas. También sacaron de entre las telarañas del cuarto de chécheres a Leocenis García, en suma, pasaron de protagonizar las criminales conspiraciones y golpes de estado en Venezuela, a serviles hincados suplicándole al criminal Donald Trump que no les patee el trasero por ineptos, de cara a la derrota segura que tendrán en las elecciones parlamentarias el 6 de diciembre.

4-. Como Chávez vislumbraba Las Pulgas… Sigo con el mercado Las Pulgas por considerar que allí hay un problema que no solo afecta al Zulia sino al país, y no ahora con la pandemia, sino desde que el exconvicto Manuel Rosales en su tránsito por la Gobernación del Zulia, le cedió los espacios de ese mercado a las mafias del paramilitarismo que afianzaron la prostitución, la pedofilia, la distribución y consumo de drogas, el bachaqueo, la compra y venta de dólares, de pesos colombianos, acciones que destruyen nuestra moneda y de ser reabierto, todos esos males regresarían con mayor fuerza de cara a las elecciones parlamentarias. Así que con la intención de acabar con esa deplorable situación, hablaré de cómo “El Gigante” Hugo Chávez vislumbraba Las Pulgas y, en función de sus aspiraciones, les comento del proyecto.

Cota Cero, es un megaplan que se planteó en mi gestión como Alcalde, el cual consiste en desarrollar en el ámbito turístico la costa del Lago de Maracaibo, que abarca desde el centro de la ciudad hasta las inmediaciones del Planetario Simón Bolívar al norte del municipio, y que conectaría con los corredores viales de la capital zuliana, 5 de Julio, Doctor Portillo, Delicias, y las principales carreteras interurbanas. Integra todas las instalaciones y edificaciones que pueden formar parte del espectro turístico de una ciudad y que, en el caso de Maracaibo, siempre han estado de espaldas al Lago y de frente a la avenida El Milagro y Los Haticos. Debemos recordar que el maltrato hacia nuestro reservorio de agua dulce, el más grande de Latinoamérica, no tiene precedentes. En la época de los abuelos, las riberas del Lago se hicieron una zona estratégica, porque facilitaba construir empresas y utilizar esa belleza natural de vertedero. Muchos complejos habitacionales se construyeron de espaldas al Lago, al contrario de lo que ocurre en otras partes del mundo, donde hasta cobran por ese privilegio. No tiene el mismo valor un apartamento con vista al mar que uno mirando el concreto de la ciudad. El proyecto Cota Cero anexaría la vieja zona de los astilleros y el terminal de pasajeros de Maracaibo mediante un puerto multifuncional. Se incluirían hoteles, club, plazas, parques, los palafitos de Santa Rosa de Agua, los manglares, el Planetario Simón Bolívar, toda esa infraestructura turística actualmente subvalorada… Darle utilidad a esas áreas enmontadas que se encuentran entre la orilla del Lago y la avenida Los Haticos.

5.- Alianza estratégica… Esa especie de corredor que también se denominó “El paseo lacustre del Coquivacoa”, sugiere una alianza estratégica que podría darse con empresarios árabes, turcos, que poseen una amplia experiencia en proyectos turísticos, aprovechando las excelentes relaciones que tienen con Venezuela. Este es un plan ambicioso, futurista, de largo aliento, en el que Maracaibo se convertiría en la metrópolis del Caribe, además, pensando en la postpandemia y viendo la experiencia de los europeos, debo decir que estos pueblos, golpeados fuertemente en el aspecto económico por el covid-19, comenzaron reactivando la industria de la construcción, por ser una de las áreas más generadoras de empleos… Ahora, en el caso específico de Las Pulgas, aunque sé que esa es una cuestión para arquitectos, expertos urbanistas en turismo, pienso que se deberían considerar escuelas y espacios que formen y fomenten nuestra cultura, valores y tradiciones, tales como la música, la pintura, nuestra artesanía y gastronomía tan diversas en nuestra región; así mismo, espacios donde se formen y fomenten el teatro, el cine y la lectura y, crear espacios donde se pueda transitar libremente por las calles y las aceras, en fin, donde propios y visitantes puedan disfrutar de nuestras bondades…Desde ya me atrevo a proponer como acto de justicia, la creación de un espacio destinado a la atención y recreación de los niños y de los ancianos, víctimas por mucho tiempo de los desafueros de Las Pulgas. Del mercado como tal, solo dejaría una inmensa maqueta como memoria histórica, tomando en cuenta que esa estructura fue referencia comercial para el Zulia y el occidente venezolano durante años, una maqueta que incluya desde los mayoristas hasta los compradores de prendas rotas, vendedores de animales, los buhoneros con sus carretillas y los pesos adulterados, una reproducción a escala en la que se tome en cuenta el más mínimo detalle.

6-. Lo que Bolton en su libro no dice de Trump… El exasesor de seguridad de la Casa Blanca, el criminal John Bolton, no ha dicho en su libro algo que los venezolanos no sepamos, con respecto a nuestro país. Por ejemplo, quién no sabe que “El Rastrojo” Juan Guaidó más que un niño es un imbécil, que lo único que ha hecho en política, aparte de robar, es bajarse los pantalones en público. El criminal Bolton dice en sus memorias tituladas: “La habitación donde ocurrió”, que a Trump le parecía “cool” la idea de invadir militarmente a Venezuela, porque los gringos consideran que es parte de los Estados Unidos; que la política exterior del gobierno yanqui hacia la Patria de Bolívar ha sido errática, criminal y poco efectiva, en fin… Sin embargo, hace silencio sobre la vinculación del anticristo Donald Trump como miembro “honorable” de la banda de pedófilos del magnate Jeffrey Epstein, y él debía conocer el caso, les explico por qué. Bolton fue consejero nacional de seguridad de EEUU desde el 9 de abril de 2018 hasta el 10 de septiembre de 2019, cuando Trump lo echó a patadas de su administración como a un perro sarnoso, y Spteind fue localizado muerto en su celda el 10 de agosto de 2019. Por las fechas, Bolton cumplía funciones imperiales para el momento del escándalo, por lo que –dada su alta investidura y su cargo- tenía que estar enterado del suceso y hasta de los discretos comentarios de las élites, empero, a pesar de la aparente indignación contra Trump, no dijo nada en su libro sabiendo que para los gringos y el mundo –porque así se infiere de las noticias- lo mandó a matar el aberrado presidente, o algún otro poderoso con el propósito de silenciarlo, y evitar que continuara desatando el largo ovillo de violadores que implica al mayor delincuente de la Casa Blanca. Ahora, si el objetivo de Bolton era vengarse o hacerle daño a Trump, ¿por qué no comentó otras monstruosidades –que deben existir- de la participación del pedófilo de la Oficina Oval en la red de Spteind? ¿Será que John Bolton también formaba parte de ese grupo de pederastas? ¿Nunca hablaron de esas atrocidades en “La habitación donde ocurrió”? ¿Verdad que es para pensarlo? Tengamos en cuenta que esos magnates gringos todos son cortados con la misma tijera.

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