Bocadillos Express
La Dra. Carolina Jaimes Branger es fabulosa con un teclado a la mano. Desde que leímos su primer trabajo nos fascinó. Carolina es ingeniera, educadora, periodista y además muy bella. Bella e inteligente un coctel explosivo y por ello los escritos que reflejan su opinión traen el sello TNT. Ayer la agarró con los “pobres corruptos” y los clasificó en tres: “un”, o “el” o “tú” corrupto. Cada uno se auto-esteriliza desde una óptica especial. Pero creo que le faltó el corrupto “de.” De conveniencia. Ella admite que nuestra crisis es de valores y que la corrupción lo abarcó todo. En consecuencia -decimos nosotros- no es posible emprender nada, ni siquiera la asepsia del sistema sin tomar de la mano a un corrupto y aprovechar su debilidad intelectual para penetrar su coraza ególatra. Los abogados le dicen “el fin justifica los medios” y lo asumimos. También una máxima recomienda que “Cuando no puedas morder la mano del enemigo, bésala”. La preocupación de Carolina la compartimos, pero pregunte a un relegado si quiere comer. Indague con un preterido si aspira retornar al progreso. Ambos afirmarán. Sin el trampolín de los corruptos no es posible. Solo hay que tener cuidado para que no nos gusten las bondades de la corrupción, que además, son exquisitas.
(José Ángel Borrego, 0414-8187722)
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