Debemos ser agradecidos. Venezuela cuenta con valiosos juristas, destacados en distintos ámbitos, aunque los ignoran en las secuestradas instancias institucionales.
Privilegio para el país es la obra del insigne maestro, Doctor Aníbal Rueda. Su actuación en distintos ámbitos deja sembrado el campo del conocimiento, resaltando los valores inherentes a la libertad, la honestidad y la justicia, como conquistas insustituibles en la actuación social. En el desempeño público.
Alfabetizador a temprana edad. Allí forja esa pasión por enseñar, que en perfecta medida es aprender, investigando y estudiando los nuevos preceptos que surgen. Insigne educador.
Sin exagerar, un Andrés Bello del siglo veinte. A su memoria maestro.
Fue profesor en enseñanza secundaria. Me han dicho que en su liceo lo querían mucho. Las enseñanzas de mis profesores en el liceo O’Leary en Barinas vuelven cuando me hablan de alguien así. Docentes a quienes criticábamos por corregirnos y enseñarnos que el camino era estudiar. El Profesor Adonay Parra Jiménez y la Profesora Rosa Terán Pérez nos aconsejaban aprender localizar a Vietnam, antes de suspender las clases. Su lucha para enseñarnos la magia de García Márquez era constante.
“Las palabras no se pueden acentuar dos veces”, insistía la profesora de literatura. Docentes al estilo de Aníbal Rueda. Eximio Profesor Rueda.
Catedrático universitario, investigador y rector de prestigiosa casa de estudios del país: la Universidad de Carabobo, cuna de valiosos juristas y profesionales de las diversas ramas del saber. Ilustre Rector Rueda.
Humilde servidor público. En numerosos cargos de la administración demostró su talento organizacional, su decencia y su callado transitar, preservando el actuar ético y la responsabilidad sin matices en las labores realizadas. Abogado Rueda: pulcritud.
Su contribución a la teoría del derecho impulsa el desarrollo de la disciplina. Fortalece el ámbito de la casación civil. Ofreció su sapiencia para la evolución de los preceptos procesales constitucionales y su consolidación autónoma. Como magistrado del máximo tribunal del país, contribuyó en la búsqueda de la zona de confluencia entre los constitucionalistas, el procesalismo científico y su integración con las funciones judiciales. Impulsa ese eje investigativo en Iberoamérica, contemplando la jurisdicción constitucional, partiendo de las categorías básicas del derecho constitucional y del derecho procesal constitucional.
Deja una obra profunda no solo en Venezuela, sino en las principales escuelas del mundo jurídico. Allí queda para los futuros estudiosos de los principios del derecho. Allí está el ejemplo de una vida, copiosa en lo teórico: un camino a seguir. El Doctor Aníbal Rueda es ejemplo para la democracia. Honores Doctor Rueda. Su creación es paso al futuro. Obra relevante.
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