El presidente de la Sociedad Venezolana de Ingenieros Agrónomos y Afines, Saúl López, presentó las estimaciones de siembra para este ciclo de invierno, que inicia el próximo mes de mayo, e informó que estiman un incremento en el rendimiento de 3,5 toneladas a 4,5 toneladas por hectárea; es decir, un alza de 28,57%.
“Para este año 2022 proyectamos que se van a producir 810.000 toneladas de maíz en una superficie sembrada de 270.000 hectáreas en este ciclo; mientras que estamos hablando de producir 152.000 toneladas de arroz en 45.000 hectáreas. Igualmente, se prevé que la zafra de caña de azúcar aumente 10%”.
López explicó que, para cumplir estos objetivos, se ha estimado un requerimiento de 158.412 toneladas de fertilizantes, para un total de 500.000 hectáreas sembradas en este ciclo de invierno. Además, el titular de la SVIAA señaló que la empresa Petroquímica de Venezuela (Pequiven) ha aumentado su capacidad productiva con una oferta nacional de 152.000 toneladas al cierre el año 2021, todavía deficitaria en 4% frente a la demanda nacional prevista para el próximo ciclo.
Resaltó que Venezuela tiene el precio de la urea más bajo, ya que el costo internacional es aproximadamente 1.000 dólares por tonelada y Pequiven la vende hasta en 150 dólares.
“Hay que aprovechar esa ventaja de tener fertilizantes más económicos, porque hemos registrado un incremento de de los precios, debido a que, el año pasado, un saco costaba en promedio 25 y hoy vende hasta en 75 dólares; eso obviamente representa un aumento crítico del costo de producción. Actualmente, la inversión promedio para producir una hectárea sembrada es de 1.250 dólares y el año pasado era 900 dólares”, explicó López.
En consecuencia, el costo de producción por hectárea aumentó 38,9% en comparación con el año pasado.
Por otra parte, el presidente de la Sociedad Venezolana de Ingenieros Agrónomos y Afines, aseguró que aún existe incertidumbre y que se necesitan 60 millones de litros de diésel para este ciclo.
“Hay productores que incluyeron en sus estructuras de costos un precio estimado de 0,35 dólares el litro de diésel, pero no saben si el país va a contar con estos 60 millones de litros que se requieren para este ciclo de invierno”, apuntó el ingeniero López.
A pesar que el gremio de ingenieros agrónomos es optimista sobre los resultados de este nuevo ciclo de invierno, el López agregó que creer que se volverán a sembrar 700.000 hectáreas de maíz es una “utopía” sin una recuperación de la maquinaria que, en este momento, está en completa obsolescencia y sin una cartera agrícola que se ubique en alrededor de los 700 millones de dólares.
“Caída del consumo”
Por su parte, el presidente de la Asociación de Agricultura Familiar, Juan Carlos Montesinos, reportó que 70% de venezolanos no consume proteína animal.
“Esta situación no eleva al consumo de vegetales. Vemos como se botan sacos de pepinos, zanahorias o de calabacín y lo que cuestan no paga ni siquiera el flete del transporte de las unidades productivas a los centros de distribución. Sin duda, va a disminuir el consumo de alimentos así haya un aumento de salario por la pérdida del poder adquisitivo”, sentenció Montesinos.
El dirigente señaló que ya se cumplió un año desde que se introdujo el proyecto de Ley para la Agricultura Familiar ante la Asamblea Nacional, para apalancar al sector, y hasta ahora no han obtenido respuesta.
“Ni siquiera hemos sido llamados para una posible discusión del proyecto y en estos momentos de inseguridad y precariedad que tiene Venezuela es cuando recordamos la importancia de esta ley, que permite el reconocimiento de los agricultores que son los que producen el 80% de los alimentos que se consumen en el país” puntualizó.
Por Banca y Negocios
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