El Gobierno venezolano podría permitir que avancen en los tribunales las apelaciones de los políticos de la oposición que buscan eliminar las prohibiciones que les impiden ocupar cargos públicos, como una forma de cumplir parcialmente con las demandas de Estados Unidos antes de una fecha límite vinculada a la flexibilización de las sanciones, dijeron fuentes a Reuters.
Estados Unidos anunció en octubre una reducción de seis meses de algunas sanciones a la industria petrolera y levantó la prohibición de negociar bonos a cambio de un acuerdo sobre las elecciones de 2024 entre el Gobierno del presidente Nicolás Maduro y la oposición.
Washington ha dicho que revertirá el alivio de las sanciones si Maduro no ha tomado medidas antes del 30 de noviembre para liberar a los presos políticos y a los estadounidenses «injustamente detenidos» y avanzar hacia el levantamiento de las prohibiciones de ocupar cargos públicos.
La ganadora de las primarias presidenciales de la oposición, María Corina Machado, se encuentra entre las personas a las que se les ha prohibido ocupar cargos públicos.
No estaba claro con qué fuerza o cuándo podría reaccionar Estados Unidos si el gobierno venezolano no toma medidas o qué mínimo podría cumplir Maduro para evitar o retrasar una respuesta estadounidense.
Hay deliberaciones en curso dentro de la administración de Biden -que se ha visto presionada por los republicanos para restablecer las sanciones- y una decisión dependerá de lo que haga Maduro, si es que hace algo, para el jueves, dijo una fuente de Washington.
Otras fuentes se mostraron escépticas sobre una respuesta inmediata de Estados Unidos y anticiparon que la reacción podría llegar semanas después.
Dos fuentes de la oposición y otra con conocimiento del asunto dijeron que el gobierno de Maduro podría permitir el avance de los recursos en el Tribunal Supremo de Justicia.
Y los propios EE.UU. esperan algún tipo de anuncio sobre el proceso legal para las prohibiciones, dijo una fuente de Washington, aunque la persona añadió que cualquier movimiento sobre el tema no necesariamente se produciría esta semana.
El Gobierno es consciente del descontento entre la población del país miembro de la OPEP -que está sufriendo nuevas presiones económicas tras un breve respiro gracias a la dolarización- y necesita el dinero de las mayores ventas de petróleo, añadió esa fuente.
Analistas han dicho previamente a Reuters que el aumento de los ingresos petroleros podría permitir al Gobierno elevar el gasto social y tratar de cortejar a los votantes para las elecciones de 2024.
Incertidumbre sobre los presos
El Gobierno liberó a cinco presos en octubre, pero desde entonces no se han producido excarcelaciones.
Sigue existiendo incertidumbre sobre cuántos o cuáles presos políticos podrían ser liberados finalmente, dijeron las fuentes de la oposición.
Estados Unidos está centrado en la liberación de los tres estadounidenses que califica de “detenidos injustamente”, así como de un cuarto estadounidense cuyo paradero exacto se desconoce, dijo una segunda fuente en Washington con conocimiento del asunto, añadiendo que podrían ser liberados en diciembre o principios de enero.
El Departamento de Estado dijo en un comunicado que no haría comentarios sobre discusiones diplomáticas privadas.
“El incumplimiento de los términos del acuerdo llevará a Estados Unidos a revertir los pasos dados”, agregó el comunicado.
Estados Unidos se toma en serio el restablecimiento de las sanciones si Maduro no cumple sus compromisos a finales de este mes y no tiene intención de dar marcha atrás en sus repetidas amenazas de revertir las medidas de relajación de sanciones, según otra persona en Washington familiarizada con el asunto.
Esa fuente dijo que aún no estaba claro qué tan rápido podría actuar Estados Unidos y hasta dónde podría llegar, pero dos fuentes dijeron que podría restablecer las sanciones a la empresa estatal de oro Minerven.
Funcionarios estadounidenses y venezolanos han mantenido contactos desde que sus representantes se reunieron por última vez en Qatar, dijeron dos de las fuentes de Washington, pero declinaron decir si se había hecho algún progreso.
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