Entre 2019 y el primer semestre de 2020 se registraron 26 suicidios de jóvenes en el territorio nacional
Los primeros días de marzo se conoció del caso de cinco niñas menores de 11 años en Táchira que fueron abusadas sexualmente por su propio padre, un hombre de 39 años identificado como Rolando Antonio Ibarra Contreras, quien quedó privado de libertad junto a la progenitora de la pequeña, por presuntamente saber de lo ocurrido e ignorar la situación.
A esta dantesca historia se suma un bebé de cinco años, también descendiente de la pareja quien era víctima de actos lascivos por parte de Ibarra Contreras.
El hecho que conmociona a gran parte del país crea dudas en la colectividad. ¿Cómo un padre puede abusar de sus propias hijas? O peor, ¿Cómo una madre permite que vulneren a sus hijos?
Los casos de este tipo parecen aumentar en la sociedad venezolana. Mary Boyer, socióloga y directora del Consejo Municipal de Defensa del Derecho del Niño, Niña y Adolescente (Cmdnna), en Girardot, rechazó la conducta de los padres “que se toman el atrevimiento de tocar las partes íntimas de los menores de manera maliciosa”, en especial a las niñas.
Calificó de preocupante que algunos padres dejen a sus representados al cuidado de familiares o conocidos por razones de trabajo o migración, pero estos se aprovechan para abusar física, verbal y psicológicamente del menor.
“Ahí podemos evidenciar la descomposición social, además del traslado de responsabilidad que es intransferible. Los padres son los primeros que atentan contra los derechos de los pequeños”, detalló.
LAS CONSECUENCIAS
Ser abusada sexualmente es una pena que debe llevar una persona de por vida, cuando se trata de un niño la situación es más complicada. Cómo puede resistir una criatura tan pequeña e inmadura tal realidad. Muchos optan por quitarse la vida.
Así pasó con Solange María García Silva de 11 años, residente del estado Zulia a quien sus familiares la encontraron pendida de una soga de tela. Aseguraron que la niña no resistió luego de la muerte de su madre y de la abuela, pero la autopsia reveló que había sido violentada sexualmente. El responsable era su papá.
La organización Cecodap informó que al menos 26 niños, niñas y adolescentes se suicidaron en 12 estados de Venezuela, entre 2019 y el primer semestre de 2020. Falcón y Guárico fueron las regiones con más casos registrados. Distrito Capital, Lara, Nueva Esparta, Mérida, Miranda y Anzoátegui, también tuvieron una alta incidencia.
Los datos recabados por la organización aseveran que 30,8 % de los menores de edad cursaba la etapa media inicial, 11,5 % primaria y 3,8 % estaba en la universidad.
¿DÓNDE DENUNCIAR? Si se sospecha o se tiene certeza de alguna situación que amenace o vulnere a un niño, niña o adolescente o sea víctima de abuso sexual infantil, hay que denunciar.La Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, otorga la facultad de recibir denuncias de violencia contra las mujeres incluidas en estas niñas y adolescentes, ante el Ministerio Público, Prefecturas y Jefaturas Civiles, División de Protección en materia de niños niñas y adolescentes, mujer y familia del Cuerpo de Investigación con competencia en la materia, Órganos de Policía, Unidades de Comando Fronterizas, Tribunales de municipios y localidades donde no existan los órganos anteriormente nombrados y cualquier otro a quien se le atribuya esta competencia.La Lopnna otorga a los Consejos de Protección la atribución de recibir denuncias sea verbal o escrita y tramitarlas y notificar de manera inmediata ante el Ministerio Público las situaciones que configuren infracciones de carácter administrativo, disciplinario, penal, civil contra niños, niñas, y adolescentes, además tienen la potestad de dictar y ejecutar medidas de protección y hacer seguimiento del cumplimiento de las mismas y de otras decisiones.  |
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