La detención y encarcelamiento de la abogada Rocío San Miguel, reconocida defensora de derechos humanos y presidenta de la ONG Control Ciudadano, ha generado alarma en la comunidad internacional y ha puesto de relieve la creciente influencia del componente militar en el gobierno de Nicolás Maduro.
En entrevista con El Pitazo, el sociólogo y director del Laboratorio de Paz, Rafael Uzcátegui, advierte que este caso evidencia una reconfiguración interna en la coalición gobernante y un acercamiento al modelo autoritario de Nicaragua.
“Nos estamos acercando al modelo de Nicaragua. Hay una teoría según la cual Rocío San Miguel se va a convertir en una ficha de la negociación, y eso ha ocurrido. Lamentablemente, una persona como Rocío San Miguel tiene un costo político y eso será puesto sobre la mesa de negociación cuando se reinicie”, acotó.
Uzcátegui destaca que la detención de San Miguel se produjo en un momento de particular sensibilidad para el estamento militar, debido a las investigaciones en curso por parte de la Corte Penal Internacional sobre posibles crímenes de lesa humanidad en Venezuela.
“El liderazgo de Nicolás Maduro se encuentra erosionado dentro de la coalición dominante, y una hipótesis es que necesita vincularse de manera personal con las Fuerzas Armadas. Lo de Rocío San Miguel es evidente en ese sentido. El Gobierno ha decidido pagar un alto costo político frente a la comunidad internacional”, apunta Uzcátegui.
El sociólogo también denuncia la práctica de utilizar la detención de familiares como método de presión y coacción, como ocurrió en este caso con la hija, hermanos y exesposos de San Miguel.
“Esta práctica se ha convertido en un patrón denunciado por la Misión de Determinación de los Hechos de Venezuela. Es muy grave y es un escándalo mayúsculo”, afirma Uzcátegui.
En su opinión, la detención de San Miguel y la suspensión de las actividades de la Oficina Técnica de Asesoría del Alto Comisionado de la ONU en Venezuela son señales de una peligrosa debilidad de la coalición gobernante.
“El Gobierno está reaccionando ante un escenario que para las autoridades era desconocido: encontrarse sin una base electoral cautiva. Estamos en el momento del chavismo sin pueblo, y frente a esa situación en la que el Gobierno no puede tener una base electoral mínima para poder medirse, está reaccionando de manera virulenta, intentando ganar tiempo”, explica Uzcátegui.
El sociólogo no descarta nuevas arremetidas en un contexto de graves irregularidades en el funcionamiento del sistema de administración de justicia.
“Esta debilidad puede ser muy peligrosa por todas las reacciones. El propio fiscal pudiera ser removido. En un escenario posible, estos días de gobierno de Saab al frente de la Fiscalía pueden ser muy peligrosos”, concluye Uzcátegui.
El caso Rocío San Miguel se ha convertido en un símbolo de la escalada represiva que vive Venezuela y del desprecio del gobierno de Maduro por los derechos humanos.
ND
Comment here