El obispo Ordinario Militar de Venezuela, monseñor Benito Adán Méndez Bracamontes, participó este viernes en la inauguración de una capilla ubicada en el centro de torturas del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) en el Helicoide.
Monseñor efectuó una misa de Acción de Gracias en la capilla Nuestra Señora del Carmen en el Helicoide y develó una estatua en honor al beato venezolano Doctor José Gregorio Hernández.
Es el mismo lugar donde la Misión Internacional Independiente de Determinación de los Hechos de la ONU identificó patrones de métodos de tortura utilizados por funcionarios en este centro de detención, tales como:
• posiciones de tensión denominadas la “crucifixión” (brazos extendidos y esposados a tubos o rejillas) y “el pulpo” (un cinturón metálico con cadenas atadas para inmovilizar la muñeca y los tobillos);
• asfixia con bolsas de plástico, sustancias químicas o un cubo de agua;
• golpes, a veces con un palo u otros objetos contundentes;
• descargas eléctricas en los genitales u otras partes del cuerpo;
• amenazas de muerte o de violencia adicional;
• amenazas de violación contra la víctima y/o sus familiares;
• desnudez forzada incluso en habitaciones mantenidas a temperaturas extremadamente bajas;
• estar encadenado durante largos períodos de tiempo.
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