El día de hoy dedicaré estás líneas para exponer sobre un suceso de nuestra historia reciente que ocurrió cuando se supone que todos debíamos celebrar como la verdadera nacionalización de nuestra industria petrolera que derivó en el paro petrolero.
Tengo que destacar ante todo que está nota surgió por iniciativa de una joven estudiante del 5to año de bachillerato que tuvo la gentileza de incluirme en su investigación, muchas gracias Eva Luna Méndez, te deseo toda la buena vibra en tu exposición.
El mismo consta de dos partes: la primera parte es un resumen contentivo de las causas y consecuencias del paro petrolero y la segunda parte, una breve entrevista que me hiciera la joven estudiante al concluir, aquí es muy importante tener en cuenta que ella no había nacido para el momento del paro.
1era. Parte.
El petróleo, las industrias básicas y la materia prima que se produce en el país es controlado por el gobierno, pero desde finales de los 90 del siglo pasado, comenzó la diatriba entre los grupos de izquierda y derecha por el control del gobierno, influenciados ambos por factores internos y externos, en este caso, gobiernos como el de Estados Unidos principal consumidor de nuestra producción nacional.
El asunto es que, el difunto Presidente Hugo Chávez promulgó el 6 de diciembre de 2002 las 49 leyes de la habilitante que incluía la Ley de Hidrocarburos que tenía el objetivo de optimizar todos los procesos de la industria petrolera para direccionar el ingreso hacia la inversión social pero esta ley fue el detonante para que factores extranjeros vinculados a las empresas transnacionales apoyaran las acciones insurreccionales de la coordinadora democrática, fedecamaras, la CTV y la nómina mayor de PDVSA para iniciar el paro cívico que duró 62 días ocasionando perdidas a la industria petrolera nacional por el orden de los 25 millardos de dólares a una empresa que para 1998 ocupaba el 5to lugar a nivel mundial y el 3er lugar en la OPEP de la que producía el 14% unos 3.3 millones de barriles diarios de petróleo mientras que en la actualidad su producción está por debajo de los 500 mil barriles diarios, además de las consecuencias directas a la cotidianidad del pueblo venezolano por la escasez de combustible, alimentos, medicinas y la quiebra de pequeñas y medianas empresas dependientes de los afiliados de Fedecamaras.
En línea general el paro petrolero fue un fracaso político para sus promotores y una verdadera calamidad para todos los venezolanos.
Se han escuchado historias de fallecidos porque las ambulancias no tenían gasolina y otras relacionadas con el llueve y escampa que nos ha tocado vivir desde aquellos días hasta el día de hoy producto de la retórica de los bandos que se disputan el poder.
El paro petrolero fue un instrumento de la derecha venezolana para derrocar al Presidente Hugo Chávez y colocar un gobierno que facilitará a las empresas transnacionales la explotación y comercialización de nuestros recursos naturales con mejores ventajas para ellos que para nosotros.
Segunda parte.
Entrevista al señor Edwin Martínez Espinoza, columnista de la página web www.aporrea.org.
Para el momento del paro petrolero tenía 30 años y trabajaba para el Ministerio de Educación.
Por: Eva Luna Méndez.
Buen día señor Edwin, – me puede informar ¿Que hacia usted para los días del paro petrolero?
Edwin – hola Eva, primero quiero agradecerte tú amabilidad y gentileza de incluirme en tu trabajo de investigación aunque no merezco semejante privilegio, de verdad, muchas gracias.
Durante los días del paro me tocó incorporarme a una red nacional de comunicación para aportar información y captar a los trabajadores para que se incorporarán a sus labores, recuerdo que me tocó convencer al ingeniero Fabricio Fermín para que asumiera el control del Menito, yo tenía contacto directo con el actual embajador de Venezuela en España, para ese momento asesor de Ali Rodríguez Araque, Presidente de PDVSA y de alguna manera me sentí corresponsable de la recuperación de nuestra principal industria.
La cotidianidad de la gente se vio severamente afectada, estaban cocinando en leña por falta de gas y algunos organismos del gobierno comenzaron a distribuir combos de alimentos PROAL para atenuar la escasez provocada por una huelga medio extraña porque por primera vez se unieron los trabajadores y los empresarios para protestar juntos, claro no era una protesta tradicional, era la continuación de un plan golpista para derrocar a Chávez.
Eva – Le confieso que me costó centrarme en este trabajo de investigación sobre un suceso que ocurrió antes de haber nacido, por eso le pregunto ¿Cuál es el saldo obtenido para el gobierno y la oposición? – Aquí los únicos grandes perdedores fuimos la mayoría de los venezolanos, la gente de la cúpula tanto del gobierno como de la oposición han convertido la contradicción política en un negocio, fíjate que si lo vemos en el contexto de los últimos años, la oposición salió con un Presidente interino por el mundo a pedir sanciones, bloqueo e invasión y por otro lado, la dirigencia del gobierno convirtio en negocios las sanciones, el bloqueo y la pandemia porque al final se le impone todo el peso del sufrimiento al pueblo alterando la psiquis colectiva de tal manera que vivimos en la incertidumbre, con ansiedad y estrés, muchos de nuestros seres queridos fallecidos antes de tiempo por enfermedades curables y otros huyendo del país porque no hay seguridad, tenemos la economía por el fango con la imposición de una moneda extranjera en el marcador de precios de bienes y servicios mientras el salario mínimo es inferior a los 5 dólares mensual. Ese es el saldo que tiene el pueblo mientras la dirigencia del gobierno y la oposición tienen una especie de pacto a espaldas del pueblo para seguir el proceso de acumulación de capital económico de una minoría sobre el infortunio de las mayorías.
Eva – Muchas gracias a usted señor Edwin por concederme estos minutos de su valioso tiempo porque el tiempo es vida y es muy agradable para mí conocer una parte de la historia que no viví por parte de una persona que no solo fue testigo referencial sino que es testigo presencial y lo difunde en cada uno de sus artículos. – ¿Nos puede regalar una reflexión para las generaciones que estamos en proceso de formación?
Edwin – claro princesa, mírate al espejo, esa es la reflexión para todos, en el reflejo de la imagen veremos lo que somos, tú eres una niña linda muy joven e inteligente, busca en ti y encontrarás tu potencial, los venezolanos somos un gentilicio único en el mundo, en cualquier país de nuestro Continente te niegan un vaso de agua porque te lo venden, en Venezuela la gente comparte la alegría y la tristeza, la gente es solidaria, ese fenómeno inoculado de la viveza criolla no es propia del venezolano, en nuestro país la gente es tan especial que no existe en el diccionario la palabra adecuada para describir la grandeza de un pueblo noble y trabajador.
Mírate al espejo y verás que encontraras que hacer desde tu espacio natural para construir el país que queremos con el país que tenemos.
El mundo está cambiando como acurre cada momento histórico por una asunto cíclico, el mundo no se acabará como dicen los predicadores de la muerte pero está en peligro de extinción la especie humana sino somos capaces de mirarnos al espejo y entender algo que solo podemos ver cuándo estamos libres de prejuicios, “la alegría hay que compartirla para multiplicarla, la tristeza hay que compartirla para reducirla”.
Edwin Martínez Espinoza.
@edwinviene
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