VENEZUELA
Enero 11, 2021
Tomado de Factores de Poder
Durante este fin de semana, las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES) realizaron un nuevo operativo en la parroquia La Vega, en la ciudad de Caracas, el cual dejó un saldo de 23 muertos entre delincuentes y vecinos de la zona.
El cuerpo “policial”, señalado por la ONU como una fuerza criminal que perpetra ejecuciones extrajudiciales, entró el viernes al barrio La Vega para desarrollar un “operativo de control y seguridad” frente a los antisociales que hacen vida en el área.Imagen cortesía. Unidades Operativas Tácticas Especiales (UOTE)
En esta línea, la cifra de la jornada alcanzó los 23 fallecidos, entre los que destacan algunos vecinos que quedaron en medio de la balacera y terminaron siendo víctimas fatales. Asimismo, las FAES dieron de baja a algunos miembros de una poderosa banda dedicada a los secuestros que, supuestamente, intentaba extender su radio de acción a otros barrios de Caracas.
Sin embargo, en el operativo murieron vecinos a causa de las balas perdidas. Uno de ellos fue identificado, por el medio El País, como Nelson Villalta, un profesor de música de 50 años que estaba en la puerta de su casa mientras los delincuentes se estaban enfrentando a los funcionarios “de seguridad”.
Asimismo, otro medio venezolano reseñó la muerte de Edwin Rivas, de 25 años de edad, a quien los familiares reconocieron este domingo en la morgue de Bello Monte. Seguidamente, los parientes, quienes decidieron estar en anonimato por temor a represalias, aseguraron que Rivas se desempeñaba como trabajador de la Maternidad Concepción Palacios.
Estos son solo dos de los casos que se han reportado de víctimas inocentes que perdieron la vida en medio del enfrentamiento de La Vega, el cual inició el pasado viernes con la toma de la zona. De acuerdo con lo informado, las FAES asesinaron al menos a tres delincuentes, conocidos por los apodos de «el Flaco», «el Mono» y «el Guacamaya», quienes supuestamente habían enfrentado a los funcionarios de las fuerzas de ejecuciones extrajudiciales con armas de fuego.
A través de las redes sociales se difundieron varios videos de los disparos de armas de distinto calibre y de la movilización de las fuerzas represivas del régimen de Maduro. Incluso, el comandante de las FAES, Miguel Domínguez, que por cierto se encuentra sancionado por EEUU desde el 2019, dijo que el cuerpo “policial” se encontraba desplegado en la zona “brindando seguridad y protección a la parroquia”.
Irónicamente, se trata de la misma “seguridad” que brindan en la represión constante y las ejecuciones extrajudiciales frente a vidas inocentes en su mayoría. Finalmente, es importante señalar que en el operativo de La Vega también participaron las Unidades Operativas Tácticas Especiales (UOTE)
Las FAES: las fuerzas de exterminio
En Venezuela e internacionalmente, las FAES son conocidas como las fuerzas de exterminio. Esto, ya que son las señaladas de ejecuciones extrajudiciales de cientos de venezolanos, disfrazadas de procedimientos donde las víctimas “se resisten a la autoridad”.
La alta comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, solicitó la disolución de esta fuerza en el año 2019 por las graves violaciones de las que están señaladas. No obstante, el régimen de Maduro hizo caso omiso a la solicitud y sigue, incluso premiando, el accionar de este “cuerpo de seguridad” creado en el 2016 por Nicolás Maduro.
Delincuencia en Venezuela
Según el Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), el 2020 cerró con al menos 11.891 muertos, incluidos 4.231 fallecimientos catalogados por las autoridades como “resistencia a la autoridad”, los cuales se presume que fueron homicidios cometidos por los cuerpos de seguridad del Estado como las FAES. Todo, mediante el uso excesivo de la fuerza o mediante ejecuciones extrajudiciales.
“La letalidad policial se ha extendido por todo el país, parece ser la única política de seguridad que se ha estado implementando. En 12 estados la policía mató más que los delincuentes. Es decir, en la mitad de entidades federales la letalidad policial fue superior a la letalidad delincuencial”, explicó un informe divulgado por el OVV, durante el cierre del año 2020.
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